Un Guardia Civil destinado en el puesto de Pilar de la Horadada se sentará en el banquillo del juzgado este próximo jueves, acusado de usar su condición de guardia para extraer información de las bases de datos oficiales a petición de terceros y facilitársela a los mismos.
Los hechos ocurrieron entre marzo y julio de 2017 cuando, según la Fiscalía, el procesado consultó dos placas de matrícula y la identidad de una persona. El Ministerio Público añade que en junio de 2016, el guardia urdió un plan con otros dos hombres para cobrar y repartirse entre los tres una fianza de 6.000 euros por el alquiler de una vivienda en Torrevieja depositada en una inmobiliaria en la que trabajaba uno de los dos hombres, sin que se haya podido acreditar que el agente llegara a cobrar esta fianza.
La acusación pública pide para el Guardia Civil una pena de prisión de nueve meses, una inhabilitación para empleo o cargo público de dos años y medio, y una multa de 3.240 euros como autor de un delito continuado de revelación de secretos y otro delito de conspiración para cometer un delito de estafa.