El Centro de Protección Animal Asoka visitó el pasado jueves por la tarde la residencia de ancianos de Orihuela.
Hasta allí se llevaron tres perritos para que los mayores tuvieran una experiencia maravillosa y disfrutaran de la compañía de estos perros de asistencia. Era la primera vez que esta protectora visitaba la residencia de Orihuela, pese a que había visitado otras de otros municipios de la comarca.
Maite López, coordinadora del voluntariado de ASOKA, ha asegurado que ha sido una «experiencia chulísima» y que «nos estaban esperando impacientes y con los brazos abiertos cuando llegamos, enseguida se pusieron a contarnos los que tenían perros, los que no, los que les gustaban, la historia de los perritos, qué hacíamos nosotros en el centro…».
La coordinadora ha explicado que esta labor es una experiencia muy agradable que «entra dentro del voluntariado, ya que ser voluntario no es solo cuidar de los animales» y la visita de perros de asistencia a estas personas mayores les ayuda mucho.
