El Consorcio Vega Baja Sostenible ha dado un paso más en lo que será la primera instalación de la entidad para la gestión de residuos. Se trata de la planta de transferencia que estará ubicada en la localidad de Dolores.
La mercantil encargada de las obras ya ha obtenido la licencia para empezar este lunes a preparar la zona, cuyos trabajos tienen un coste de 202.775 euros y un plazo de tres meses.
En concreto, las obras consistirán en mejorar el acceso rodado del pavimento, así como adecuar la parcela para cuestiones como el alcantarillado, suministro de agua potable, de energía eléctrica y alumbrado público. La parcela tiene 6.600 metros cuadrados y está ubicada en el polígono industrial del municipio.
Según el alcalde de Dolores, Joaquín Hernández, la creación de esta planta de transferencia «puede generar hasta 18 puestos de trabajo y un impacto económico de un millón de euros».
En esta planta de transferencia se instalará una nave, que será la primera de las dos que hacen falta en la comarca y recibirá los residuos de Algorfa, Almoradí, Benijófar, Catral, Daya Nueva y Daya Vieja, Formentera del Segura, Guardamar del Segura, Los Montesionos, Rojales, San Fulgencio, Torrevieja y el propio municipio. En ella, se compactarán los residuos que posteriormente se trasladarán a las plantas de tratamiento. Asimismo, la instalación acogerá más de cien toneladas de residuos sólidos urbanos.
Por su parte, el presidente del Consorcio, Manuel Pineda, ha asegurado que «esta es una instalación que dará servicio a la zona norte de la comarca a falta de la planta de la zona sur».