Las cabras domésticas fueron soltadas en la sierra de Callosa de Segura hace casi cuatro décadas. El hacerlo sin control ha provocado que estas se reproduzcan y pasten a sus anchas ya no solo por la sierra callosina, sino también por el pueblo y municipios cercanos como Cox o Redován en busca de agua y alimentos.
La sierra de Callosa de Segura cuenta con plantas endémicas, es decir, plantas que son propias y exclusivas de esta zona y no se pueden encontrar en otro lugar. Entre 2005 y 2010 se aprobaron tres normativas que denominaban a la sierra Paraje Natural Municipal y se declararon once microrreservas de flora. En esas normativas se contempla la posibilidad de actuar en contra de cualquier especie invasora alóctona que ponga en peligro la su conservación. «Por ello, en 2021, el Ayuntamiento de Callosa de Segura estuvo capturando cabras para que se las llevara un cabrero para comercializar con ellas», asegura la petición que se ha iniciado en change.org para recoger firmas con el fin de salvar a las cabras e indica que «conseguimos paralizar la captura has encontrar refugios o santuarios que pudieran acogerlas». La petición lleva ya más de 1.700 firmas.
Son muchos los testimonios y los vídeos donde podemos ver cómo las cabras bajan incluso hasta el pueblo para poder beber agua de las fuentes, pues con la escasez de lluvias se les hace más complicado todavía poder beber agua en la sierra. Este problema ha generado controversia en la zona y ha dividido, por un lado, a la parte de la población que quiere salvar a las cabras y, por otro lado, a la parte de la población que no está a favor de salvarlas.
Ante esta sobrepoblación de cabras, el temor es que la solución sea permitir la caza en la sierra de Callosa de Segura para cazar a las cabras. Pues a principios del mes de julio, los ayuntamientos de Cox, Callosa de Segura y Redován mantuvieron una reunión en la Dirección Territorial de Medio Ambiente, Agricultura, Ganadería y Pesca para atajar el problema de superpoblación de cabras y acometer la mejor solución en base a la normativa tanto para los animales como para la población.
Por ello, un grupo de vecinos y vecinas ha organizado una concentración en la tarde del sábado 27 de julio. Primero en la plaza de España de Callosa de Segura a las 18:00 horas y luego, a las 19:00 horas, en la plaza de la Glorieta de Cox.