La Policía Nacional ha detenido en Callosa de Segura y también en Alicante a tres personas en tres operaciones diferentes acusadas de los delitos contra los derechos de los trabajadores, favorecimiento la inmigración ilegal y tráfico de mano de obra, al tener en sus empresas a varias personas en condiciones laborales muy por debajo de las mínimas legalmente garantizadas, abusando de su situación de vulnerabilidad, al ser migrantes que no dominan el idioma y desconocen sus derechos, encontrándose en sus mayoría sin contrato laboral, seguro de accidentes y sin permiso de residencia ni trabajo.
Los trabajadores realizaban jornadas de seis de la mañana a diez de la noche y cobraban según los kilos de hortalizas que pudieran limpiar, siendo unos diez euros diarios
En el caso de Callosa de Segura, se trata de una empresa dedicada a la recolección y distribución de hortalizas. Los policías localizaron a 16 trabajadores, todos de nacionalidad extranjera y 9 de ellos en situación irregular.
Los trabajadores eran explotados sin respetar la más elemental normativa en materia de riesgos laborales en jornadas maratonianas de 06:00 de la mañana a 22:00 horas de la noche sin descanso ni para comer, siendo su principal labor la de pelar cebollas, siéndoles abonado el salario en relación a la cantidad de trabajo realizado, a razón de cinco céntimos de euro por kilogramo de hortaliza limpia, debiendo llegar a la cantidad de 100 kilos para cobrar la cantidad de 10 euros, una media de 1,6 euros la hora.
Por tanto, a los detenidos se les acusa de delitos contra los derechos de los trabajadores, tramitándose las correspondientes diligencias policiales para dar cuenta a la Autoridad Judicial competente.