El colegio número 20 de Orihuela Costa, que sería el tercero en el litoral oriolano, no estará listo para el inicio del próximo curso escolar. Las últimas promesas eran de que en septiembre pudieran ponerse en marcha las prefabricadas, pero, fuentes del consistorio oriolano han reconocido que, muy a su pesar, no será así.
Una noticia que no ha gustado nada a la comunidad educativa hasta el punto de que el equipo directivo del CEIP Playas de Orihuela ha dimitido en bloque y las familias han decidido organizar una manifestación el próximo lunes 17 de junio a las 13:15 horas frente a las puertas del Ayuntamiento de Orihuela Costa ante la saturación en los centros educativos y cómo está perjudicando en la enseñanza, así lo contaba Dafne Gellert, una de las madres de dos alumnos afectados, en Hoy por Hoy Vega Baja.
En diciembre de 2022, el Consell aprobó la resolución de creación de este nuevo colegio, pero, el Ayuntamiento de Orihuela tardó más de un año en sacar adelante el contrato de obras para adecuar los terrenos que debía ceder a la Generalitat Valenciana para proceder al montaje e instalación de las aulas prefabricadas. El anterior equipo de gobierno del PSOE y C’s llegó a cambiar varias veces de ubicación, la calle Níspero, luego el parking del Centro Comercial Zenia Boulevard, y luego la calle Madreperla.
Asimismo, fuentes del ayuntamiento aseguran a este medio que, cuando llegaron al gobierno, no había ninguna parcela elegida ni estudiada para la instalación del colegio y tuvieron que llevar a cabo un proceso que ha retrasado todo todavía más, así como la adecuación del terreno escogido, finalmente en la calle Níspero, que se encontraba lleno de escombros. Precisamente, para ese trabajo se aprobó en el pleno de septiembre de 2023 una partida de 60.000 euros.
La saturación en los centros educativos de Orihuela Costa no es nada nuevo, una zona con unos 30.000 habitantes hace que solo dos colegios sean insuficientes. A eso le añades la llegada continua de alumnos durante todo el curso, lo que dificulta la situación todavía más: entre el CEIP Playas de Orihuela y el Colegio Los Dolses tienen una capacidad de 900 alumnos y cuentan, a día de hoy, con más de 1.500. Por consiguiente, el IES Playa Flamenca sufre también ese colapso.
El día a día en estos colegios se ha convertido en dar clases en los pasillos y en el patio, así como en no disponer de ningún aula específica porque todos los espacios se han tenido que habilitar como aulas. Por ejemplo, en el CEIP Los Dolses hay 19 aulas habilitadas para tal fin, ahora hay 32 porque han tenido que reconvertir espacios como el aula de música o la biblioteca. Pero, a todo esto, el 80% del alumnado desconoce el idioma o tiene un nivel muy básico de castellano, lo que resiente la calidad del servicio que prestan y dificulta el poder dar clase cada día con normalidad.

Desde la oposición, el grupo municipalista Cambiemos Orihuela denuncia que “la respuesta del gobierno sea que la construcción del nuevo centro es competencia autonómica y, por lo tanto, se laven las manos en este asunto, más allá de la adecuación de la parcela”. Así lo explica el edil de Cambiemos Orihuela, Quique Montero:
Por su parte, desde el partido socialista oriolano, la concejala María García había señalado, anteriormente, que, la parcela elegida no era la idónea, tanto por su situación en pendiente como por su estado, y propusimos alternativas que habrían facilitado la construcción de la nueva escuela en un plazo razonable”.