El Centro de Rehabilitación e Integración Social (CRIS) de Orihuela está atravesando difíciles momentos desde que la DANA les dejase sin sus instalaciones ubicadas en el Palmeral.
Cuatro meses después de las inundaciones el personal técnico está haciendo todo lo posible por desarrollar su trabajo a la perfección, pero no con la excelencia que debiese para garantizar la privacidad de los 70 usuarios que padecen enfermedad mental. El director del centro, Alberto Moragriega, en declaraciones a Radio Orihuela Cadena Ser, ha señalado que debido a lo celosos que son con la intimidad y privacidad de los pacientes la situación del centro y sus problemas han pasado a un discreto lugar durante los últimos meses.
El director del CRIS ha relatado lo complicado que ha sido volver a la “normalidad” por las situaciones tan dramáticas vividas a consecuencia de la DANA, entre las que se encuentran la de tres usuarios que perdieron su casa. Ello unido a la paralización del servicio durante unas semanas agudizó su estado psicopatológico.
Actualmente el servicio se presta en horario de mañana en el edificio municipal Carmen Conde (en la calle Miguel Hernández, conocida como calle Arriba), pero no reúne las condiciones adecuadas para desarrollar todo el trabajo con garantías de la intimidad que necesitan los usuarios, ha dicho Moragriega.
Desde el Ayuntamiento han mostrado voluntad y contemplado un proyecto a largo plazo, pero el CRIS necesita una solución a corto plazo, al menos con la adecuación de las instalaciones en las que se encuentran ahora de forma provisional.