El Hospital Vega Baja ha actualizado su proceso de atención farmacéutica a una media de 1000 pacientes externos al mes. Esto es posible gracias a las obras de remodelación y ampliación en el Servicio de Farmacia mejorando la atención a los pacientes, el espacio de trabajo y el sistema de dispensación de medicamentos al aproximar la zona de almacenamiento y el punto de entrega a los pacientes.
Las nuevas instalaciones ofrecen al paciente más protección a su intimidad con una atención individual y exclusiva de manos del personal sanitario, en donde recibe las recomendaciones de uso, información detallada sobre los horarios para la toma del medicamento, incluso las indicaciones necesarias si el fármaco cuenta con algún dispositivo para administrarlo, además de revisar la medicación global que tiene pautada, que evita duplicidades o cualquier interacción con otros tratamientos.
“Intentamos ajustar las citas de recogida de medicamentos a otras citas que el paciente tenga en el centro hospitalario para evitar desplazamientos inecesarios”, ha afirmado Francisco Rodríguez farmacéutico del hospital Vega Baja.
El servicio es un trabajo conjunto entre los farmacéuticos y el personal de enfermería, donde las nuevas tecnologías están plenamente implantadas y un 90% de las prescripciones son electrónicas.
“Además de potenciar y consolidar el trabajo principal del servicio de farmacia, como es la elaboración de medicamentos, la dispensación interna o los controles de calidad, la dirección del centro tiene como objetivo darle prioridad a la humanización de la atención. Es por ello que nos hemos centrado en cómo atendemos a nuestros pacientes e ir mejorando la atención”, ha afirmado el gerente del departamento Miguel Fayos.