Javier Gil Torregrosa es una de las jóvenes promesas del ciclismo. A sus 21 años, ya destaca en la categoría élite sub-23 de la mano del equipo Baqué Ideus BH Team. Nació en Raiguero de Bonanza (Orihuela), pero muy pronto tuvo que emigrar lejos de la provincia para poder crecer en su carrera deportiva. El pasado fin de semana, consiguió la victoria en el prestigioso trofeo Euskaldum.
Después de una dura jornada de 112 kilómetros, un selecto grupo de 20 ciclistas quedaba en cabeza para los últimos 25. Finalmente fue el oriolano el que pudo levantar las manos al cielo en el muro final en las calles de Oiartzun.
Éste podría ser un año clave para dar el salto al ciclismo profesional: «Es mi cuarto año de sub-23. Es un año clave para conseguir dar ese salto. Me gustaría poder darlo y ojalá conseguir el objetivo de llegar a profesional. Pase lo que pase, lo que quiero es darlo todo hasta final de temporada y lo que tenga que ser será, pero al menos no quiero quedarme con la sensación de que pude dar más.», confiesa Gil.