El Sindicato Central de Regantes del Acueducto Tajo-Segura ha convocado esta mañana un acto de protesta contra las nuevas reglas de explotación que tiene previstas aplicar el Ministerio de Transición Ecológica a partir del 2027. A la protesta, celebrada en Murcia, han asistido, entre otros, una representación de la Diputación Provincial de Alicante. Su vicepresidenta, Ana Serna, aseguraba un frente común con la Generalitat, la Región de Murcia y la Provincia de Almería para enfrentarse a estas medidas con las acciones que sean necesarias. Además, atacaba al Gobierno de España acusándolo de «alicantinofobia».
Por su parte, el presidente de ASAJA-Alicante, José Vicente Andreu, en declaraciones para Radio Orihuela, se mostraba algo más conciliador haciendo un llamamiento a la negociación con el Gobierno de España. No obstante, se mantenía firme en las afirmaciones que vienen haciendo y anunciaba movilizaciones y protestas «en caso de no formular unas normas de explotación que permitan la llegada del agua al Levante». Terminaba diciendo que «el agua es vida y si roban el agua a los alicantinos, les roban la vida».
Tanto Ana Serna como José Vicente Andreu acusaban al gobierno de redactar estas normas de explotación «sin ningún criterio científico». Lamentaban también el recorte en el agua trasvasada que, dicen, será del 40% lo cual, según la vicepresidenta de la Diputación de Alicante, «será una catástrofe para las tres provincias, que plantarán cara juntas».