El lugar donde encontraron los restos de la víctima
Sucesos

Esclarecen el homicidio de un vecino de Bigastro desaparecido hace un año

La Guardia Civil ha detenido a un hombre y una mujer de 53 y 51 años respectivamente como presuntos autores del homicidio de un hombre de 45 años, de Orihuela y vecino de Bigastro, desaparecido hace un año en Almería. Asimismo en la misma ciudad, se ha detenido a otro hombre de 45 años y nacionalidad lituana, como presunto autor de un delito de encubrimiento.

Fue la madre de la víctima la que denunció su desaparición en junio de 2017 al perder el contacto que mantenía con él telefónicamente, aproximadamente cada diez días. La Guardia Civil inició entonces una investigación bastante compleja ya que el fallecido apenas mantenía relación con nadie y se desconocía su domicilio. Su familia incluso acudió al programa “Desparecidos” de Paco Lobatón de TVE .

Los agentes rastrearon las llamadas de la víctima y comprobaron que los contactos de su teléfono móvil habían intentado localizarle, salvo la última llamada registrada, la de una mujer con la que al parecer mantenía una relación sentimental. A través de la ubicación ofrecida por el operador también pudo comprobarse que el oriolano visitaba a diario un centro de Cruz Roja. Con estos datos se abrieron nuevas líneas de investigación, pero fue en abril cuando estrecharon el cerco a la sospechosa. Ésta había sido denunciada por otro hombre por amenazas de muerte, de hecho, le dijo que lo iba a matar y enterrar en el mismo sitio que al “chiquitín”, nombre con el que se conocía a la víctima.

Los agentes averiguaron que, aunque la detenida y el desaparecido eran pareja, en aquellos días había salido de prisión la ex pareja de ella. Tras su salida de la cárcel, debió dirigirse a su casa, lugar en donde, al percatarse de las llamadas que el desaparecido le hacía a la mujer, sintió celos de la relación que ambos mantenían. En la chabola, donde vivía ella se inició una fuerte discusión entre los tres acabando golpeado con resultado de muerte el oriolano. El cadáver fue ocultado a escasos metros de la vivienda, debajo de un colchón abandonado.

Los detenidos están acusado de un delito de homicidio doloso y otros dos de tráfico de drogas y tenencia ilícita de armas, ya que en la casa se encontraron 300 gramos de hachís y un revólver.

El Juzgado de Instrucción nº 4 de Almería, que se ha hecho cargo del caso, ha decretado su ingreso en prisión.

El tercer detenido, un hombre de nacionalidad lituana y 45 años, se le imputa un delito de encubrimiento, y ha sido puesto en libertad con cargos.

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