Inspector jefe: “Fenoll tenía una obsesión con las grabaciones”

El juicio del caso Brugal en Orihuela continúa y hoy ha sido el turno del que fuera Inspector Jefe del Grupo de Delincuencia Económica, uno de los testigos que trabajó en las primeras investigaciones. Su función era coordinar y estar al cargo de la investigación.
El exinspector ha declarado que durante el mes de mayo de 2007, cuando comenzaba la investigación, se encontraba pendiente la adjudicación de la contrata de Limpieza del Ayuntamiento de Orihuela. El testigo ha señalado que en las primeras escuchas telefónicas ya observaban que las conversaciones de Ángel Fenoll eran con personas influyentes o políticos y que era habitual escucharle decir frases como “es mejor tenerlos a todos pillados”, lo que reflejaba que “tenía una obsesión con las grabaciones”.
El testigo participó en el registro de la casa de Ángel Fenoll, en la pedanía de La Aparecida y asegura que le sorprendió “porque nunca había estado en un registro en el que se encontrara tanto material audiovisual”. El exinspector ha explicado que esto evidenciaba un modus operandi en el que se vinculaba su amistad con políticos y personas influyentes con su “misión de obtener concesiones valiéndose de amenazas”.
El que fuera Inspector también ha revelado datos interesantes, como que en el despacho de Ángel Fenoll encontraron lo que parecía una alarma de incendios, pero que en realidad escondía una cámara conectada a un dispositivo de grabación. También que en una ocasión contrató a un detective privado para grabar una reunión en una piscina, porque la otra persona intenba evitar que Fenoll llevara un micrófono para grabarle. También ha declarado que encontraron vídeos donde se veía a Fenoll entregando sobres con dinero a otras personas y conversaciones en las que se entiende que se estaban financiando actos del PP fletando autobuses para ir a eventos.