En Orihuela, en lo que llevamos de año 2024, ha ascendido el número de atenciones a mujeres en el Servicio Municipal de Atención a las víctimas de Violencia de Género (SEMAVI), concretamente 180 mujeres, un 30% más que el año anterior.
Estos datos los ha facilitado la concejala de Igualdad en el Ayuntamiento de Orihuela, Agustina Rodríguez en el marco la conmemoración del 25-N, Día internacional para la eliminación de la violencia contra la mujer, quien ha explicado que “desde el año 2022 se observa un incremento progresivo e imparable por lo que debemos insistir en la importancia de la erradicación de la violencia de género por las repercusiones que tiene en las mujeres, así como en sus descendientes y en su familia extensa”.
De las 180 mujeres atendidas, 140 accedieron al servicio de atención psicosocial integral (psicológica, social, laboral…) y 40 solicitaron únicamente información y orientación relativa a los servicios y recursos disponibles por su condición de víctimas.
Las mayores tasas de incidencia se concentran en el grupo de edad que abarca de los 26 a los 45 años (60% de mujeres atendidas). Sin embargo, cada vez acceden más mujeres menores de edad y/o de 25 años al servicio.
Los datos también recogen que el 73,58% de las usuarias atendidas son españolas, seguido de lejos del grupo de mujeres de nacionalidades sudamericanas (23%). Así como que la mayoría de ellas (55,71%) residen en Orihuela casco.
Atendiendo al vínculo o relación que las víctimas de violencia de género tienen con el agresor, los datos muestran que la violencia de género ya no ocurre dentro del matrimonio, principalmente, sino en relaciones de pareja (con o sin convivencia), que representan el 65% del total.
Por lo que al tiempo de relación de pareja se refiere, destaca que la detección y el reconocimiento como víctima de violencia de género, así como la interposición de denuncia al respecto, cada vez se produce con más anterioridad. De hecho, el 67,14% de las víctimas que acuden al SEMAVIG han mantenido una relación cuya duración se establece desde pocos meses hasta 6 años, lo cual coincide con los datos nacionales y académicos que ubican la duración de la relación en una media de 4 años.
“Uno de los aspectos en los que hemos de incidir y por el que nos debemos preocupar, es que el 62,74% de las usuarias que reciben atención en el SEMAVIG tienen hijas e hijos menores a su cargo”, ha indicado Agustina Rodríguez.
Ante todos estos datos, desde la concejalía de Igualdad consideran que “esta realidad supone que estamos ante una generación de mujeres que al estar más informadas, se sienten más seguras, menos vulnerables. Es cierto que la conciencia y el conocimiento está permitiendo que pongan límites con anterioridad, pero también lo es que el reconocimiento del control está más difuminado. En este sentido, la violencia de género digital, el acoso y control a través de las redes sociales, está creciendo exponencialmente, mientras que la normalización del consumo de sustancias difumina la capacidad de establecer límites”.
Por otra parte, el consumo generalizado de pornografía desde edades muy tempranas está llevando a la adquisición de conductas sexuales con un alto componente machista y violento. Además, el incremento de agresiones sexuales que se están produciendo dentro de la pareja, es una cuestión a tener muy presente, ha apuntado la edil.