En el marco de las obras de reparación que está realizando la Confederación Hidrográfica del Segura en la comarca tras las inundaciones del pasado mes de septiembre se ha procedido al arreglo de una de las paredes de la Rambla de Abanilla a su paso por Benferri. Se trata de uno de los muros que se encuentran en la zona inferior del Cementerio de este municipio y que pese a la virulencia de la riada no sufrió daños estructurales.
Con la obra ejecutada por parte de la CHS se ha dotado de estabilidad al camposanto benferrejo y a la vez se ha reforzado esa zona de la Rambla de Abanilla ante posibles futuras avenidas de agua. Se trata de una zona especialmente sensible ya que cuentan las crónicas que en la riada de 1949 el agua de la Rambla de Abanilla arrastró los ataúdes hasta la ciudad de Orihuela, algo que afortunadamente no ocurrió en la DANA de 2019.