La Guardia Civil de Murcia ha detenido a una mujer en Orihuela, de nacionalidad ucraniana, como presunta autora de una decena de ciberestafas, valoradas en más de un millón de euros y hay dos órdenes internacionales de búsqueda y detención para otras dos mujeres.
La investigación se inició tras la denuncia de una víctima, vecina de Mazarrón. La estafa se llevaba a cabo a través de una empresa que ofertaba inversiones tanto en criptomonedas como en otros productos financieros, con grandes beneficios a partir de pequeñas compras y, después, insistentes ofertas de oportunidades únicas que hacía a las víctimas aportar más dinero.
Los equipos Arroba de la Guardia Civil, especializados en la investigación de ciberdelitos, permitieron averiguar que el dinero había sido transferido a distintas cuentas bancarias de titularidad empresarial y de ahí, derivado a otras cuentas de países del este. Tanto las identidades de los titulares de las empresas como las mercantiles eran falsas y, al parecer, habían sido creadas para mover grandes cantidades de dinero sin levantar sospechas.
La operación ‘Blokil’ ha permitido localizar a más de una decena de víctimas por toda España y esclarecer 11 delitos de estafa, delitos continuados de falsedad documental y blanqueo de capitales, valorados en 1.300.000 euros. La detenida ha sido puesta a disposición del Juzgado de Instrucción de Totana en Murcia.