La Guardia Civil ha incautado 800 kilos de pescado de origen y características irregulares en cuatro establecimientos de Torrevieja, tras la realización de diversas inspecciones administrativas, enmarcadas en un Plan Anual de control de productos alimenticios procedentes de la pesca.
Como resultado de estas inspecciones en los establecimientos hosteleros de Torrevieja se han podido constatar diversas infracciones, como la existencia de pescado procedente de la pesca submarina, modalidad solamente recreativa, por lo que no se puede comercializar el pescado obtenido de esta forma, así como productos que no presentan las tallas y pesos reglamentarios. Otros se desconoce su origen por lo que no se puede determinar su control sanitario.
Estas infracciones han sido detectadas en dos restaurantes, a los que se les ha incautado un total de 500 kilos de pescado como pulpo, mero, lubina, entre otros; mercancía cuyo valor ronda los 10.000 euros en el mercado.
Por otro lado, una pescadería y un almacén también poseían en total 300 kilos de pulpo que carecían de los datos de trazabilidad, las fechas de congelación y las de consumo y que se estaba comercializando con un etiquetado de producto fresco.