La Guardia Civil de Jacarilla investiga a un hombre español de 22 años como presunto autor de un delito de maltrato animal, por tener a su perro de raza American Staffordshire Terrier en pésimo estado de salud, con multitud de heridas en extremidades y orejas (que habían sido cortadas) y que apenas podía moverse.
El perro fue detectado por una patrulla cuando realizaban servicio por una pedanía de Orihuela. Enseguida solicitaron colaboración de un centro de protección animal de Orihuela, que emitió informe veterinario por el cual se acreditó la gravedad de las lesiones y la mala situación el perro, prácticamente en semiabandono y con signos de que pudiera haber estado destinado a peleas de perros.
El propietario tampoco se había preocupado de dotar al perro de chip y carecía de seguro y licencia obligatoria por la tenencia de un perro potencialmente peligroso.