La Policía Local de Orihuela ha vallado la Iglesia Parroquial de Santas Justa y Rufina por la caída de cascotes procedentes de la torre.
En el lugar se encuentra también Protección Civil para proteger la zona. Al parecer, la caída de cascotes se ha producido como consecuencia de las obras -responsabilidad del Obispado- están ejecutándose en la parte superior de la torre para su reparación. La previsión es que esté arreglada en unos dos o tres días, según fuentes cercanas.

Se trata de una torre decorada con pináculos y una bóveda de crucería en el cuerpo de campanas. Junto con el Miquelet de la Catedral de Valencia, son los únicos campanarios góticos de esta tipología en la Comunidad Valenciana. El mismo posee un importante conjunto de campanas, en su mayor parte de los siglos XVII al XIX. Además de una de las piezas de relojería más antiguas de España y la más antigua de la Comunidad Valenciana, datado de principios del siglo XIV.