Agentes de la Policía Nacional han desarticulado una organización criminal dedicada, presuntamente, a la trata de mujeres para su explotación sexual en clubs de alterne ubicados en la provincia de Alicante, uno de ellos en Orihuela. Se estima que el entramado habría explotado a más de 1000 mujeres en el último año.
La organización criminal contaba con tres clubs de alterne, en Alicante, Elche y Orihuela, que trataban de disfrazarlos como pensiones u hostales para enmascarar su actividad. El entramado había creado una estructura empresarial destinada al enriquecimiento a través de la explotación sexual de multitud de mujeres extranjeras en situación de vulnerabilidad, además llevaba un alto tren de vida.
Las víctimas, que vivían en los propios clubs de alterne, eran obligadas a trabajar a cualquier hora del día, siendo controladas en todo momento por los miembros de la organización criminal a través de complejos sistemas de video-vigilancia con imagen y sonido, teniendo limitada su libertad de movimientos ya que únicamente podían salir dos horas.