Más de un centenar de sanitarios se han concentrado ante las puertas del Hospital Vega Baja en repulsa a la agresión que sufrió el pasado miércoles una profesional sanitaria, concretamente una médica anestesista, durante el ejercicio de sus funciones.
La concentración ha dado comienzo con la lectura de un manifiesto por parte del gerente del Departamento de Orihuela, Pedro Antón, en el que ha expresado su “más enérgica condena y repulsa” ante las agresiones, ya que “este acto de violencia, lejos de ser un hecho aislado, revela una preocupante escalada de agresiones hacia los profesionales sanitarios en nuestro entorno laboral”.
Desde la Junta de Personal, su presidente, Enrique Hurtado, ha hecho un llamamiento para que “se sigan reforzando las medidas de protección y seguridad en los centros de trabajo con el fin de garantizar la integridad física y psicológica de los profesionales”. Para ello, desde la Junta Central, han pedido “protocolos de actuación claros y eficaces y la aplicación de las máximas sanciones legales a los responsables de estos actos”.
La Junta de Personal ha indicado que “se compromete a trabajar de manera conjunta con la Administración sanitaria para garantizar un entorno laboral seguro y respetuoso para todos los profesionales”.
Para finalizar, desde la gerencia del hospital se ha señalado que “desde el primer momento, se ha acompañado a la víctima, se la ha asesorado jurídicamente y se la ha acompañado incluso a poner la denuncia correspondiente”. En este sentido, el Servicio de Prevención de Riesgos Laborales del Departamento de Salud de Orihuela realiza un seguimiento a través de una vigilancia activa de la situación clínica de la afectada.