El Juzgado de lo Penal número 4 de Orihuela ha condenado a ocho meses de prisión por intrusismo a la dueña de un centro de estética de Torrevieja por practicar tratamientos sanitarios en los pies sin el correspondiente título de Grado en Podología ni estar colegiada, «condiciones imprescindibles para la realización de este tipo de prácticas».
Así lo ha explicado el Ilustre Colegio Oficial de Podólogos de la Comunitat Valenciana (ICOPCV) en un comunicado, que fue la entidad que interpuso una querella frente a la ahora condenada por tratar alteraciones relacionadas con la salud de las uñas de los pies, así como impartir formación online sobre este tema «sin disponer del título universitario que faculta para esto».
El equipo jurídico de la institución defendió que la condenada trataba en su centro de Torrevieja uñas encarnadas, tarea que «únicamente puede ser realizada por profesional sanitario y que no corresponde y excede al ámbito de la estética». Además, el ICOPCV ha señalado que también ofrecía formación online en la que enseñaba cómo tratar alteraciones en las uñas. La sentencia, que es firme, la ha condenado a ocho meses de prisión.
Importante la concienciación ciudadana
La presidenta de los podólogos valencianos, Pilar Nieto, ha considerado «muy importante» la concienciación sobre que en un centro de estética solo pueden «aplicar técnicas de embellecimiento, pero nunca sanitarias» a los pies.
«No pueden tratar ninguna afección en ellos. La lucha contra el intrusismo en la Podología continúa siendo uno de los ejes del trabajo del Colegio de Podólogos de la Comunitat Valenciana porque estas acciones ponen en un riesgo muy serio a la salud de la población», ha enfatizado.
Por su parte, Maite García, vicepresidenta del ICOPCV, ha apuntado que, además de combatir estas situaciones, tomarán medidas legales «contra todos aquellos que en cualquier entorno, incluidas las redes sociales, hablen o den consejos como expertos de la salud de los pies sin la más mínima formación ni cualificación». «Este tipo de declaraciones pueden llevar a confusión a la población y, por supuesto, perjudicarles», ha añadido.
En este sentido, han recomendado a la población solicitar el número de colegiación para asegurarse que la persona que trata la salud de sus pies es un profesional cualificado.