Las encuestas lo vaticinaban y las Elecciones del domingo 10 de noviembre lo ratificó. El partido político de mayor crecimiento en estos momentos en la comarca es Vox. La formación de Santiago Abascal logró imponerse en 10 municipios de la Vega Baja como por ejemplo Callosa de Segura, Albatera o Pilar de la Horadada. En Almoradí fue también el partido más votado junto al PP y en Orihuela quedó en segunda posición pero “pisándole los talones” a los populares.
Los motivos que explican el ascenso de Vox en el sur de la provincia de Alicante pueden ser varios, desde que el candidato número uno Manuel Mestre sea de Orihuela, desde ahora único representante de la Vega Baja en el Congreso de los Diputados, hasta el hartazgo de la ciudadanía es asuntos como seguridad, inmigración ilegal o descontento con las formaciones políticas consideradas de “la vieja política”. Tampoco hay que perder de vista temas de ámbito nacional como la crisis catalana que habría llevado a muchos votantes a buscar acciones contundentes como las que ofrece Vox.
A partir de ahora empieza lo difícil para los de Abascal ya que el partido tiene un desarrollo organizativo débil por no decir inexistente en la comarca a lo que hay que sumar problemas internos a nivel provincial. La búsqueda de personas que cumplan un perfil adecuado para poder transmitir de forma correcta el mensaje de Vox así como la implantación de unas agrupaciones locales que desarrollen un trabajo serio y efectivo serán claves para determinar si la formación conservadora se consolida como actor político en la Vega Baja.