Los oftalmólogos del Hospital Universitario de Torrevieja han advertido de las lesiones en los ojos que se pueden producir por el sol y el cloro del verano así como por evitar revisiones por la pandemia tras el confinamiento.
La exposición prolongada al sol, el cloro del agua de las piscinas, el aire acondicionado y el uso continuado de dispositivos digitales pueden provocar lesiones en los ojos y problemas de visión
Queratitis, degeneraciones conjuntivales, afecciones en la retina y conjuntivitis irritativas son algunas de las consecuencias de una exposición prolongada al sol y a tratamientos del agua de piscinas. Por eso, los especialistas recomiendan retomar las revisiones oculares, en especial a las personas diabéticas, hipertensas, con glaucoma, miopía e hipermetropía.
Y además de las personas de edad avanzada y con patologías previas, oftalmólogos de Ribera Salud recuerdan que, en verano, la alta radiación solar y el cloro de las piscinas pueden provocar lesiones importantes en los ojos, que debe controlar un especialista. La queratitis actínica es una de las lesiones más habituales en esta época del año “y se produce tras una exposición prolongada y sin protección al sol, provocando dolor, ojos rojos, lagrimeo y fotofobia, aunque los efectos suelen desaparecer en uno o dos días”, según explica la doctora Huertas. Son habituales también las degeneraciones conjuntivales como el pterigium (conocido como “uña”) o la pingúecula y que pueden producir sequedad ocular, con producción de úlceras corneales, sensación de cuerpo extraño y problemas de refracción.
La especialista en Oftalmología en el Hospital de Torrevieja, Eva Salinas, recomienda usar gafas de sol adecuadas en verano para reducir la exposición a los rayos ultravioletas. Ha incidido en que es muy importante que estén homologadas para que los filtros sean los adecuados y así protejan nuestros ojos. Incluso aconseja el uso de gorros y sombreros.
Cuidado, además de con el cloro, con el aire acondicionado porque produce sequedad ocular que se traduce en molestias diarias continuas. También hay que llevar especial cuidado con el uso continuado de dispositivos digitales, sobre todo de ordenador y teléfonos móviles que tienen consecuencias para la vista como la fatiga y la sequedad ocular que son los síntomas más comunes y que pueden llegar a producir visión borrosa, visión doble, fluctuaciones de la visión, fotofobia, sensación de cuerpo extraño, enrojecimiento y lagrimeo, por lo que también recomiendan retomar las revisiones periódicas.
Todos los centros sanitarios de Ribera Salud han tomado las medidas de seguridad y protección necesarias entre profesionales y pacientes, con protocolos específicos anti-COVID19, que garantizan la seguridad en las consultas y salas de espera.