Indignación y preocupación en Molins, la pedanía oriolana donde el reguerón está sin compuertas y tras las lluvias de esta semana, algunos campos han quedado anegados con las consecuentes pérdidas de cultivo, lo que ha provocado el enfado de los agricultores y el miedo entre los vecinos que, de haber llovido más, podrían haber vuelto a vivir la situación de la DANA de septiembre de 2019, que inundó la pedanía completamente.
Fue entonces cuando el Juzgado Privativo de Aguas de Orihuela, que es el responsable del reguerón, solicitó ayuda a la Diputación de Alicante para las obras de reparación y creación de las compuertas. La institución provincial adjudicó el contrato a una empresa, cuyas compuertas eran muy endebles y no soportaban la cantidad de agua que bajaba del reguerón y se quitaron. Durante las lluvias de esta semana, cuando fueron a bajar las compuertas, se encontrarón con que no habían: «Sentí rabia e impotencia de ver que no habían compuertas y que, por tanto, no podíamos parar el agua que bajaba por el reguerón, eso hizo que bancales se anegaran. Entonces junto a Bomberos y Protección Civil fuimos por los bungalows y demás para comprobar que todo estaba bien, ya que había zonas en las que había bastante agua y temíamos que volviera a ocurrir lo de septiembre«, explica el alcalde pedáneo, Reyes Esquiva.
Desde el Juzgado Privativo de Aguas aseguran que la empresa adjudicataria está trabajando en la creación de unas compuertas adecuadas para el reguerón y que se encuentran hablando con Diputación desde ayer para solucionar este problema. Un problema que podría acabar en desgracia, otra vez, como advierte el alcalde pedáneo: «Si llega a acumularse un metro más de agua, tenemos que volver a llamar a la UME y volver a salir en barcas. Esto tiene que solucionarse ya, no podemos vivir así».