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Torrevieja, entre los municipios de toda la Comunidad Valenciana, que se han visto afectados por la huelga educativa convocada este martes 30 de noviembre y desde varios colectivos denuncian que el conseller de Educación, Vicent Marzà, no haya establecido las medidas para garantizar la inclusión
Las familias de COVAPA, FAPA Gabriel Miró y APANEE están indignadas ante «la dejadez y el abandono hacia los alumnos con necesidades educativas especiales». Eso es lo que denuncian en un comunicado conjunto estas tres asociaciones para poner de manifiesto las dificultades experimentadas en toda la Comunidad Valenciana.
Desde principio de curso ya habían demandado más personal para atender al alumnado con necesidades educativas especiales y ahora se han sumado las dificultades propias de una jornada de huelga como esta del martes 30 de noviembre.
Derecho a educación
Desde estas asociaciones apuntan que «respetamos y apoyamos el derecho a la huelga que nuestro ordenamiento jurídico otorga a cualquier trabajador, pero nuestros hijos también tienen su derecho a la educación y la Conselleria no ha adoptado las medidas necesarias para cubrir los servicios mínimos vitales del alumnado con necesidades educativas especiales escolarizado en aulas específicas de centros ordinarios».
«Las necesidades de este alumnado son las mismas que en un centro de educación especial», según estas asociaciones, y además afirman que «es imprescindible la atención de educadores y unos cuidados específicos». Y critican que la solución dada a las familias es que «no traigan a los niños al centro o que vayan ellos a atenderlos».
«COVAPA, la FAPA Gabriel Miró y APANEE no vamos a parar de luchar y exigir que se adopten medidas y arbitren soluciones por parte del Conseller de Educación Vicent Marzà y la Directora General de Inclusión Educativa, Raquel Andrés, ante los problemas que acumulamos desde principio de curso para una real inclusión», afirman en el comunicado.
Foto noticia: imagen de archivo