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El incendio se produjo este lunes en el Hondo de Amorós, cerca del acceso a las urbanizaciones de San Fulgencio
Un gesto tan normalizado como el de tirar colillas encendidas por la ventanilla del vehículo en circulación es sancionable y provoca desgracias como esta. Esta imprudencia ha causado el incendio de 200 metros cuadrados en el Hondo de Amorós, cerca del acceso a las urbanizaciones del término municipal de San Fulgencio.
La zona afectada es un espacio natural protegido
Se trata de un espacio natural protegido que ahora tiene 200 metros cuadrados calcinados. El fuego se produjo el pasado lunes después de que algún imprudente lanzara desde su vehículo una colilla encendida. Hasta el lugar tuvo que movilizarse un camión de bomberos, una autobomba urbana, una unidad de bomberos forestales, una patrulla de Policía Local y un patrulla de la Guardia Civil.
La normativa de Tráfico prohíbe «arrojar a la vía pública objetos que puedan provocar un accidente o un incendio». La multa por incumplir la norma es de 200 euros y la pérdida de cuatro puntos del permiso de conducir.
